La crisis de legitimidad política ha propiciado un debate sobre la representación, el papel de las élites y su funcionamiento. En los últimos años han surgido nuevos partidos que han sabido canalizar el malestar de la ciudadanía con sus representantes, consiguiendo representación a nivel nacional. Este trabajo traza el perfil social del nuevo Congreso de los Diputados tras las elecciones del 28-A, analizando si la entrada de nuevos partidos (Podemos, Ciudadanos y Vox) en las instituciones ha supuesto una renovación real del perfil social de la Cámara o si solo ha implicado la sustitución de las élites. Para ello se estudian las variables sexo, edad, nivel educativo y ocupación profesional de sus señorías a lo largo de la última etapa democrática, estableciendo una comparación en la que se analizan las diferencias y similitudes de perfil social entre los partidos nuevos y los tradicionales. Tras ello, se mide la distancia existente entre la sociedad española y sus representantes políticos mediante la aplicación del Índice de Desproporción Social.