La teoría política ante el desafío de un mundo descentralizado

Mario López Areu

(Universidad Pontificia Comillas)

A lo largo de la última década hemos presenciado fenómenos políticos tales como el auge de China y la India, el resurgir nacionalista ruso, el fracaso de la Primavera Árabe y la expansión del Estado Islámico. Todos ellos tienen en común que son fenómenos modernos que están teniendo lugar en la no-Europa y que la ciencia política y disciplinas afines a menudo encuentran difícil explicar adecuadamente, a menudo porque sus causas y dinámicas internas no se adecúan al canon teórico occidental. Ante esa deficiencia analítica, somos testigos del reciclaje de viejos conceptos políticos, descripciones secundarias o en negativo y el retorno a dicotomías amigo-enemigo y moderno-tradicional.

En esta comunicación buscamos reflexionar acerca de la labor fundamental que realiza la teoría política a la hora de equipar a las ciencias sociales con los conceptos y teorías que les ayudan a explicar los fenómenos socio-políticos. Debido a la importancia de dicha tarea, es imperativo actualmente llevar a cabo una expansión de las fronteras conceptuales de la teoría política para aumentar su capacidad heurística y reflexiva ante los fenómenos modernos no-europeos que, para bien o para mal, van a jugar un papel muy relevante en la nueva “normalidad” de un mundo descentralizado.

A menudo, el miedo a ser acusados de validar o “empatizar” con un fenómeno político conlleva la negación de la modernidad del mismo. Como defiende Max Weber (1917), ante un fenómeno socio-político, no se trata de hacer juicios de valor, sino de comprenderlo y explicarlo. Para ello, esta comunicación se construirá sobre la base de algunos de los teóricos de las ideas que han trabajado sobre la necesidad de comprender la modernidad en plural, pero alejados de los juicios de valor, como Reinhart Koselleck (1996), Charles Taylor (2001) o Dipesh Chakrabarty (2000).