En la mayor parte de discursos provenientes de los movimientos de derecha radical populista podemos encontrar una relación contradictoria entre dos grandes cosmovisiones. En esta contraposición se aprecian dos corrientes que, en cierto sentido, podrían definirse como diametralmente opuestas. Por un lado, encontramos una tendencia ultraconservadora hija de la corriente tradicionalista antirrevolucionaria que podríamos caracterizar como reaccionaria. Por otro, se hallaría la corriente modernista, vitalista, o palingenésica que vela por la precipitación de la sociedad hacia el abismo y posterior renacimiento total.

Esta visión vitalista de la nación o, en su caso, la raza; está presente en el discurso de todos los partidos fascistas del Siglo XX, y es, con toda probabilidad, la característica común más destacable entre la derecha radical populista actual y el fascismo del pasado siglo. El objetivo principal de este trabajo es localizar y analizar los elementos conceptuales más destacables que comparten ambas corrientes y, por otra parte, aquellos que nos permiten desvincular a dichos movimientos entre sí.

A fin de cumplir el objetivo de la presente investigación, haré uso de una batería de autores procedentes de la corriente conservadora del pensamiento político, puesto que éstos son probablemente quienes han explorado con mayor profundidad una serie significantes políticos hegemónicos (tradición, anti-racionalismo, superación del eje izquierda – derecha, entre otros) que hoy cobran fuerza en los programas de derecha radical populista, y pueden dar buena respuesta a la pregunta de investigación principal: cuando hablamos de derecha radical populista ¿nos hallamos ante un movimiento palingenésico similar a los fascismos del Siglo XX, o simplemente tratamos con una forma más musculosa de conservadurismo? Con toda seguridad, las conclusiones que hallaremos tras la realización de este trabajo no serán unívocamente concluyentes; no obstante, considero que puede tener un gran valor explicativo la exploración conceptual la procedencia ideológica de los elementos discursivos de los que bebe la fuerza política al alza del Siglo XXI.