A lo largo de las cuatro últimas décadas, politólogos y sociólogos de diversos países se han interesado por analizar las diferencias en las orientaciones y actitudes sociopolíticas de hombres y mujeres. Un buen número de estudios de opinión pública han demostrado que existía una brecha de género tanto en el comportamiento político como en las preferencias. Estas diferencias parecían ser amplias y consistentes, pues no solo se había podido constatar que hombres y mujeres tenían distintas posiciones ideológicas o votaban a distintos partidos, sino que adoptaban distintas actitudes respecto al papel que el Estado debe tener en la sociedad, a los problemas sociales que deben abordarse prioritariamente y a cómo deben repartirse los recursos públicos entre las distintas políticas. A mayor abundamiento, las mujeres se mostraban menos interesadas por estas cuestiones de índole política y, en consecuencia, estarían menos informadas.

Sin embargo, la evidencia empírica proporcionada por investigaciones más recientes sugiere que esta brecha de género ha ido reduciéndose y que, incluso, en algunos de estos temas podría haberse producido un intercambio en las posiciones de hombres y mujeres. En este contexto, resulta relevante intentar contestar a una serie de preguntas: ¿tienen distintas actitudes hombres y mujeres respecto a cuál debe ser el papel del Estado en la provisión a la ciudadanía y en qué áreas debe intervenir?; ¿existe una fractura de género significativa en las preferencias de gasto público, en las opiniones sobre la asignación de los recursos públicos?; ¿varían las prioridades en función del género?; ¿tienen mayor conocimiento sobre estas materias específicas los hombres que las mujeres?

Con la finalidad de responder a estas preguntas de investigación, la ponencia pretende analizar la brecha de género en las actitudes hacia el papel del Estado y en las preferencias de gasto público en España, y su evolución desde los años noventa. Más específicamente, los objetivos que se plantean en este trabajo son tres: a) estudiar la brecha de género en las preferencias de política pública, a través del análisis de la demanda de gasto público de hombres y mujeres en una serie de políticas durante las últimas tres décadas; b) evaluar las diferencias en las actitudes de cada sexo hacia el papel del Estado en la provisión de medios a la ciudadanía y en el mantenimiento de determinadas prestaciones públicas; c) examinar la fractura de género en el nivel de conocimiento sobre las responsabilidades estatales y la distribución de los recursos públicos.

La investigación se basa en el análisis de los datos demoscópicos procedentes de varios Estudios del CIS, fundamentalmente de la serie anual «Opinión Pública y Política Fiscal», y de la World Walue Survey.