Marruecos es un socio preferencial para la Unión Europea. Las relaciones entre ambos comenzaron oficialmente en el año 1972 con la creación de la Política Global Mediterránea, cuyo objetivo era dar el establecimiento de relaciones de cooperación económica y financiera con algunos países del litoral Mediterráneo. Desde entonces, la UE y Marruecos han desarrollado unas relaciones profundas, hasta el punto de ser el país de la Vecindad Sur con más lazos de cooperación con la UE. El objetivo de esta presentación es analizar el tratamiento que el Sahara Occidental ha recibido en los acuerdos establecidos entre ambas partes, principalmente en aquellos que se refieran a la explotación de recursos naturales, y dilucidar qué posibles efectos puede tener dicho tratamiento sobre la resolución del conflicto.