Los gobiernos de coalición autonómicos en España tienen una larga trayectoria y han sido frecuentes en el sistema político español desde el inicio de la década de las ochenta, aunque con distinta intensidad dependiendo del periodo y de la Comunidad Autónoma. Un tipo de gobierno, el de coalición, que en contextos en los que no ha habido mayorías absolutas se ha articulado en la mayoría de las ocasiones como la opción elegida por las formaciones políticas para poder superar el proceso de investidura del Presidente del Gobierno autonómico a la vez que se garantizaba la gobernabilidad y estabilidad del ejecutivo durante la legislatura.  

Desde el surgimiento y auge de los nuevos partidos políticos desde las elecciones europeas de 2014, en el marco autonómico han sido varias las citas electorales en cada región. En estos comicios se ha podido comprobar que las nuevas fuerzas políticas además de provocar importantes variaciones sobre el comportamiento electoral, también en numerosos casos han sido coprotagonistas de los gobiernos de coalición autonómicos. Estos nuevos escenarios han tenido también consecuencias en los rendimientos electorales de las formaciones que han tenido responsabilidad en los gobiernos de coalición en el marco autonómico.

De esta forma, este trabajo desarrolla un análisis de los rendimientos electorales de los partidos políticos que han formado parte de los gobiernos de coalición autonómicos surgidos tras las elecciones autonómicas de mayo de 2015 hasta la actualidad, cuantificando el rendimiento electoral a partir de la diferencia del resultado cosechado por los partidos políticos entre las elecciones de segundo orden que inician la legislatura autonómica y las posteriores del mismo orden con las que se finaliza la legislatura. Esta medición nos permitirá conocer, desde una perspectiva individualizada y agregada, tanto el sentido del rendimiento (ventaja o desventajas), su magnitud, al igual que discernir las similitudes y diferencias en el conjunto de las regiones.