La implantación en 2006 de una Educación para la Ciudadanía en el currículum escolar generó un gran debate social. El Partido Popular junto a otros sectores conservadores de la sociedad encabezarían protestas, boicots e incluso una moción a la asignatura. Como motivos a este rechazo se argumentaba que con esta educación se imponía el laicismo, el relativismo moral o la ideología de género (Muñoz Ramírez, 2015). Lo que también estaba en juego era la interferencia del Estado en un plano moral que había sido competencia histórica de la Iglesia Católica y era transmitida desde la institución familiar.

Vox ha reavivado este debate desde su irrupción en 2018 con su crítica a la presencia de ‘ideología de género’ y contenidos feministas en los centros educativos que también impregnan las políticas públicas. El trasfondo de este debate, en el que han participado el resto de formaciones políticas, consiste en demostrar –o rechazar– la existencia de deficiencias cívicas y democráticas que deben paliarse y si es el campo educativo el más adecuado para hacerlo.

Este trabajo busca indagar en el discurso que Partido Popular y Vox han mantenido sobre la ‘ideologización’ de la educación, específicamente con contenidos feministas y de género, a través del análisis de discurso de las intervenciones públicas de sus miembros. Se plantea también un trazado del proceso político desde el que explorar los principios ideológicos que guían a la derecha española a la hora de distribuir las competencias público/privadas, así como el impacto político de su discurso.