Algunos trabajos como los de Castro (2020), Castro y Mo (2020), Jaráiz et al. (2021), Rama et al. (2021) o Rivera et al. (2021), permiten homologar a Vox como partido de extrema derecha a través de elementos identificativos como el sentimiento antiinmigración o anti-multiculturalismo (Mudde, 2000), la xenofobia, el autoritarismo (Carter, 2000) o el populismo (Norris e Inglehart, 2019).

Por otro lado, el auge de los partidos de extrema derecha en Europa también se ha examinado desde la lectura de los ganadores y los perdedores de la globalización que ha derivado en una nueva lectura a través de la fractura política entre “integración y demarcación” (Kriesi, 2006:922) europea. La extrema derecha ha sostenido este sentimiento anti-integración mediante el discurso antiglobalización, la defensa de la identidad nacional y la seguridad ciudadana (Kitschelt, 1995; Kriesi, 2006). Es decir, a través del proteccionismo, la defensa de las fronteras nacionales y la defensa de los valores étnico-culturales.

Algunas de las aportaciones teóricas comprenden la distinción de tres tipos de euroescepticismo (Vasilopoulou, 2011): el “euroescepticismo de rechazo” que mantiene cierta aceptación armónica de la cultura, historia y religión europeas, pero incluye un duro rechazo al principio de cooperación dentro del marco de la UE; el “euroescepticismo condicional”, que aprueba cierta cooperación dentro del marco de la UE, pero rechaza la construcción política unitaria de la UE; y el “euroescepticismo comprometido”, el cual rechaza la integración europea en términos de cesión de soberanía, pero mantiene la participación en las estructuras e instituciones de la UE. Ante esto, nuestras preguntas son, ¿Es Vox un partido euroesceptico? ¿Cómo se construye el euroescepticismo en España?

El trabajo que aquí se propone, busca examinar las orientaciones de los votantes de Vox sobre el proceso de integración europea y determinar hasta qué punto el antieuropeísmo en Vox es una característica homologable al resto de partidos de extrema derecha europeos (Hooghe y Marks 2005). Por otro lado, trataremos de explicar el euroescepticismo en España a través de las características tradicionalmente conectadas a la extrema derecha, con especial atención al componente emocional.