El envejecimiento de la población es uno de los mayores retos a los que se enfrentan los Estados del Bienestar en los países posindustriales en lo que se refiere al aumento de las necesidades de cuidados de larga duración (LTC). Este tema ha puesto en el centro del debate público cómo se rigen los servicios públicos de cuidado y cómo estos son capaces de satisfacer las necesidades de las personas, tanto cuidadoras como receptoras de cuidados. Temas relevantes en la administración pública en la gestión de servicios de cuidados són la rendición de cuentas de los proveedores públicos o privados, las condiciones laborales, las innovaciones en el tipo de servicios, la calidad del servicio, la participación democrática en la gestión y la contención de costos. En este trabajo analizo la preferencia y capacidad de maniobra de los gobiernos locales para introducir cambios en estos dominios dado su contexto administrativo y del Estado de Bienestar en el que se incrusta. La pregunta de investigación general seria: ¿cuáles son los factores comunes y diferenciales en diferentes contextos administrativos y del Estado de Bienestar que dificultan/permiten cambio en el tipo de gobernanza de servicios públicos de cuidados? Estudiando los casos de Barcelona y Copenhague me centro en las experiencias locales en regímenes del sur y nórdico, respectivamente. Barcelona tiene un modelo de atención familiarista que tradicionalmente se ha centrado en la contención de costes a través de la externalización de servicios públicos, con mayor intensidad tras la crisis de 2008. Sin embargo, desde 2015 una plataforma municipalista ha explorado la municipalización con el objetivo de mejorar las condiciones laborales y la calidad del servicio. Si bien encuentro que las dificultades de realizarla se deben en sí tanto al contexto como a las lógicas internas del servicio y de la administración pública española, también argumento que es porqué en si existe la posibilidad de introducir cambios dentro de la externalización, incluida una mejora en la rendición de cuentas de terceros. Por otro lado, Copenhague ha tenido tradicionalmente un modelo de atención universal con provisión pública directa, pero las tendencias recientes de mercantilización de servicios presionan hacia la externalización de servicios. Actualmente se está realizando la investigación sobre este caso y su comparación con Barcelona.