El mundo sindical está cambiando. Los sindicatos españoles de hoy en día no son los mismos que inauguraron la etapa constitucional a pesar de que las siglas se mantengan. La transformación que están experimentando está siendo forzada por cambios estructurales tanto sociales como económicos, que han supuesto un descenso ligero, pero prácticamente continuo desde los 90, de la densidad sindical. Esta tendencia puede acentuarse si los sindicatos no encuentran fórmulas para atraer a los outisders, i.e. mujeres, jóvenes, precarios…

Una de las consecuencias de la bajada de la densidad sindical es un cambio en el modelo de legitimación de los sindicatos (Dufour & Hege, 2010). Si originariamente los sindicatos se ganaban su puesto en la mesa de negociaciones tripartitas por su capacidad de representar a los trabajadores a través de la afiliación, en el contexto neo-corporativista actual es su posición institucionalizada y su capacidad de movilizar más allá de sus miembros lo que les permite mantener su rol en la política social.

Este cambio de modelo de legitimidad puede ir unido a cambios de modelo de liderazgo, ya que al tener que dirigirse a audiencias más amplias los sindicatos corren el riesgo de caer en ideas o liderazgos populistas, como ha sucedido en los partidos políticos. En esta ponencia analizo a través de los discursos de Comisiones Obreras si dicho cambio puede observarse en el sindicalismo español.