Cuando se estudian los posibles condicionantes de la participación política es frecuente que el género esté incluido dentro de éstos. Varias investigaciones han señalado que, al igual que ocurre en otros campos, en el de la política también encontramos una brecha de género. Ésta se traduce normalmente en una menor implicación, conocimiento y participación política por parte de las mujeres. Como posibles explicaciones se han señalado la socialización en roles de género y la distribución desigual de recursos. Entre estos recursos se incluyen desde el nivel de estudios hasta el tiempo disponible para dedicarlo a la política. Este último punto es especialmente importante porque, a pesar de que en los últimos años se ha registrado un aumento generalizado en el nivel de estudios de las mujeres, la responsabilidad de los cuidados y del trabajo en el hogar sigue recayendo principalmente sobre ellas. Esta situación de reparto desigual del trabajo se ha agravado especialmente tras el estallido de la crisis sanitaria del COVID-19, algo que ya han puesto de manifiesto numerosos informes, como los elaborados por UN Woman (2021) y EIGE (2021). Teniendo todo esto en cuenta este paper pretende medir hasta qué punto la crisis asociada al Covid-19 ha agravado esta brecha de género que ya existía en la política y cuáles han sido sus principales efectos y sobre qué dimensiones (participación, implicación, conocimiento) ha tenido un mayor impacto.