El Tratado de Lisboa, que entró en vigor en diciembre de 2009, se presenta como nueva etapa en la creación de una Unión Europea más estrecha y más próxima a los ciudadanos. El Tratado señala que la Comunidad quiere profundizar en la integración y sentar la construcción de Europa sobre  bases firmes. Además afirma que a través del Tratado se pretende fortalecer el funcionamiento democrático de las instituciones y crear una ciudadanía común.  

En el Tratado de Lisboa, que constituye el derecho originario de la Unión,  los Estados hacen explícita la adhesión a los principios de libertad, democracia, respeto a los derechos humanos a las libertades fundamentales y al Estado de Derecho. También subrayan la adhesión a los Derechos sociales proclamados en Turín y la Carta comunitaria de los derechos sociales fundamentales de los trabajadores.

En consonancia con los valores proclamados en el articulado, la Unión se compromete a combatir la exclusión, la discriminación, fomentar la justicia, la igualdad entre mujeres y hombres la solidaridad entre las generaciones y los derechos del niño (art. 3.3).  Este interés por los derechos se ve reforzado en el artículo 6 del Tratado, en virtud del cual  la Unión reconoce los derechos y principios enunciados en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, aprobada en Niza el año 2000, a la que se otorga el mismo valor jurídico que el Tratado de Lisboa. 

La importancia que el Tratado de la Unión otorga a los valores recogidos en su articulado es de tal magnitud que recomienda a las instituciones (Parlamento, Comisión, Consejo y Parlamento) que vigilen los riesgos de violación por parte de los Estados y, en caso de violación, se dirijan recomendaciones a los Estados.

La cuestión que nos planteamos en nuestra ponencia es la siguiente: ¿En qué aspectos concretos las políticas adoptadas por parte de la Unión Europea, en respuesta a la crisis financiera, económica y de la deuda, han ido en contra de los principios de libertad, democracia, respeto a los derechos humanos, las libertades fundamentales, el Estado de Derecho y los demás valores contenidos en el Tratado de la Unión Europea? 

Trataremos de dar respuesta a la cuestión planteada desde la perspectiva de los actores institucionales. Esto significa que efectuaremos nuestro análisis examinando las políticas propuestas y promovidas por la Comisión Europea, el contenido de las resoluciones y los debates habidos en el Parlamento Europeo y,en fin, los Informes aprobados por el Comité Económico y Social Europeo.