~~Después del levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en Enero de 1994 las Fuerzas Armadas mexicanas tomaron un papel cada vez más protagónico en México. En el imaginario colectivo mexicano las Fuerzas Armadas cuentan con un elevado grado de aceptación. La población opina que el respeto por los derechos humanos es mayor en el ejército que en la policía o en el gobierno, y el apoyo al ejército en la lucha contra la delincuencia organizada es elevado en todos los estratos sociodemográficos. Sin embargo, la expansión de funciones del ejército en materia de seguridad pública eleva el riesgo de corrupción. En los últimos años el ejército ha cometido un sinnúmero de violaciones a los derechos humanos: detenciones arbitrarias, registros domiciliarios ilegales, desapariciones forzadas, golpizas, tortura y asesinatos. 
Esta ponencia, sustentada en una metodología cualitativa que incluye entrevistas en profundidad a 50 migrantes de Centroamérica en tránsito por Tamaulipas, el área más violenta de México, busca responder a la siguiente pregunta de investigación ¿Cuál es la valoración que tienen los migrantes centroamericanos asentados en Tamaulipas del ejército? Partimos la siguiente hipótesis: El ejército mexicano se caracteriza por niveles más bajos de corrupción y por un mayor respeto de los derechos humanos de los migrantes centroamericanos que los agentes de migración y las fuerzas policíacas, que en ocasiones han actuado en connivencia con la delincuencia organizada.