La presente investigación en curso busca analizar la irrupción del germen feminista dentro de los movimientos sociales, fenómeno conocido como Feministización, que se instala en la sociedad chilena para develar una serie de micromachismos y actitudes patriarcales que los movimientos sociales no habían considerado.

Desde el año 2011 hemos sido testigos de una ola de movilizaciones sociales en diversos lugares del planeta. Movimientos como La Primavera Árabe, el 15M en Madrid, Occupy Wall Street en EE. UU, #YoSoy132 en México, protestas en Tel Aviv, manifestaciones en Grecia contra los recortes, Ocupa Tokio en Japón, y Movimiento Estudiantil en Chile por la “Educación Gratuita” posicionaron al “protester” como un actor político que se valida en la opinión pública.

Esta explosión movilizadora se acrecentó de la mano de una movilización global feminista. Los movimientos sociales evidenciaron tener temas no resueltos con los problemas de género, emergiendo desde dentro de los movimientos una serie de cuestionamientos hacia el orden patriarcal y violencia machista. Un hecho clave de este proceso ha sido el fenómeno #MeToo que sirvió de inspiración para la propagación del cuestionamiento dentro de los movimientos políticos más importantes del último tiempo, imbricándose en su interior sub-movimientos de mujeres que tienen petitorios y exigencias para su movimiento político. En cierto sentido la Feministización ha inundado todas las esferas de los movimientos sociales, convirtiéndose en una arista que forma parte del movimiento en sí, sin que sea un "asunto" a resolver con posterioridad o un apéndice de los movimientos.                

En mayo de 2018 explotó en Chile lo que para varias estudiosas de los movimientos sociales y el feminismo se considera la” tercera ola feminista”. Mediante la toma de Universidades por todo el país, las estudiantes de Chile inspiradas en el movimiento transnacional #MeToo visibilizaron el sexismo y la violencia de género en las universidades y contextos educativos, así como también dentro del Movimiento Estudiantil y sus repertorios de acción, postulando que la orgánica estudiantil a pesar de su éxito con demandas en educación desde el año 2011 a la fecha, tenía temas aparcados en cuando al género y el feminismo. Amparadas en la consigna “lo personal es político” las estudiantes feministas ponen en agenda un cuestionamiento de las bases patriarcales de la sociedad y la cultura chilena que va más allá del movimiento social en sí.

Para abordar este fenómeno se utilizan las siguientes preguntas guías ¿Cómo se feminizan los movimientos sociales en todo el mundo? ¿Cómo y por qué se expande con tanta fuerza dentro del Movimiento Estudiantil chileno? ¿Qué consecuencias políticas tiene el giro feminista el Movimiento Estudiantil? ¿Cuáles son los marcos de sentido construidos en torno a esta feminización? ¿Cuál es el peso de las redes digitales en este proceso?

La hipótesis que guían este estudio son las siguientes:

1. Las mujeres aparecen como una demanda interna dentro del movimiento estudiantil que genera hostilidades, tensiones y divisiones dentro del mismo.

2: La presión de las mujeres participantes en el movimiento estudiantil chileno produce un cambio en los marcos de sentido y en los repertorios de acción, con ello una reinvención del movimiento social, que se (re)define a partir de ese momento como feminista.

3: El feminismo es utilizado como herramienta de politización dentro del Movimiento Estudiantil.

4.- El movimiento #MeToo sirvió de catalizador que expande un cuestionamiento mundial hacia la violencia de género e inspira una ola de denuncias.

La justificación del estudio radica en que la serie de demandas que el movimiento feminista exige al mismo movimiento estudiantil (acusándolo de machista y perpetuar el patriarcado) lo posiciona como un movimiento que nace dentro de otro movimiento, dando origen a una contrademanda con la que el movimiento estudiantil debe lidiar, incorporar y mutar hacia un movimiento estudiantil con perspectiva de género.

Los objetivos específicos que se buscan alcanzar son los siguientes:

1. Analizar cómo se produce y expande la Feministización en los repertorios de acción de los Movimientos Sociales en el marco de la ola transnacional de movilizaciones feministas.
2. Analizar el cambio de los marcos de sentidos de activistas del Movimiento Estudiantil en torno a la Feministización de sus elementos (Programa, Discurso y Marcos)
3. Describir la experiencia de las activistas del ME, en clave cronológica con predecesoras
4. Indagar en la discusión interna del ME sobre las demandas de las mujeres en su interior, en relación con la comprensión del problema feminista como estructural en lugar de problema personal.

En cuanto al alcance metodológico de este estudio, es abordado desde un enfoque feminista, la fundamentación de esto es la búsqueda de exploración e indagación de un estudio de caso desde el conocimiento situado, en este caso específico, dentro de la incubación feminista dentro del movimiento estudiantil chileno. La obtención de la información se hará a través de fuentes primarias y fuentes secundarias de información. En cuanto a las fuentes primarias se utilizarán entrevistas, grupo focal. También se utilizará el análisis de actas de asambleas de grupos feministas y etnografía digital.

A modo de conclusiones preliminares, podemos señalar que el movimiento feminista es promotor y catalizador de un fenómeno de deconstrución de la sociedad chilena, el que va desde lo domestico, pasando por lo cultural y lo político. Los movimientos sociales se han feministizado y son feministas desde su definición interna del quienes son y hacia dónde quieren ir. Por otro lado, en (contra) movimiento estudiantil feminista es considerado la ventana de oportunidades para que las mujeres y el feminismo de instalen y definan procesos políticos trascendentes como lo es el proceso constituyente actual, el cual es pionero en materia de paridad.