En esta ponencia se examinará la contribución que el pensamiento weberiano puede realizar -hoy día- al concepto y práctica de las Políticas Públicas desde una dimensión profundamente ética. La idea de corresponsabilidad que actualmente preside una creciente doctrina en la materia de Políticas Públicas, halla sustento en el concepto de finalidad objetiva que Weber armó intelectualmente como parte del servicio a la sociedad y al Estado.

Aquí estudiaremos el legado de Weber en su aplicación práctica a las Administraciones Públicas, sobre todo, en la conexión entre Políticas Públicas y regeneración ética. Lo público era para Weber un espacio que exigía eficacia y vocación. El papel del funcionario como eje del sentido práctico que Weber imprimió a su concepción del Estado y de la Administración, desmiente el mantra acerca de la rigidez weberiana en su Sociología del Estado. Así, la función efectiva que la burocracia desempeña en la sociedad y en la Administración es otro línea fundamental de nuestro trabajo para diseccionar la utilidad del pensamiento weberiano acerca de la imbricación entre lo público y el ejercicio permanente de la ética.