La irrupción de Vox en el escenario político y electoral español, así como en los diferentes territorios que se integran dentro de este, ha abierto un importante debate sobre muchos de los aspectos definitorios de esta nueva formación, así como de su naturaleza ideológica. El interés por este fenómeno es transversal y acoge desde la ciudadanía hasta las esferas de la información y de la comunicación (Acha, 2019). Los últimos años se ha asistido a un incremento de la presencia electoral de las fuerzas de extrema derecha en buena parte de los países europeos y, por extensión, en el estado español y en algunos de los territorios que conforman el estado español, llegando incluso a condicionar la formación de gobierno y a gobernar territorios formando coaliciones (Antón-Mellón y Hernández-Carr, 2016). Se hace referencia aquí a fuerzas políticas que hasta hace tres décadas eran irrelevantes en los diferentes escenarios políticos y electorales y que actualmente condicionan formaciones de gobierno después de elecciones de primero y de segundo orden; caracterizados por ideologías fundamentadas en una combinación de nacionalismo y xenofobia, adoptando y emitiendo visiones autoritarias de la sociedad adheridas a los valores de orden y ley (Ferreira, 2019).

El caso español, junto con otros como el portugués, ha estado una excepción durante gran parte de la historia democrática reciente, como una excepción destacable en lo relacionado con la presencia de la extrema derecha en el plano electoral: sin una presencia relevante y con fuerzas minúsculas de extrema derecha fragmentadas. Ejemplo de ello es Plataforma per Catalunya (PxC) i España2000 (E2000), siendo las únicas organizaciones posicionadas a la derecha del Partido Popular (PP) que han tenido un éxito relativo – PxC proporcionalmente más que E2000- durante estos últimos treinta años, sin haber sobrepasado el ámbito municipal y sin sumar un número destacable de municipios con representación (Alonso & Rovira, 2015).

Si bien, en la Comunidad Valenciana como en el conjunto del estado, a raíz de la crisis económica de 2008 se han originado unos factores de demanda de la extrema derecha que han hecho que Vox tenga un destacable y preocupante éxito, equiparable al del resto de formaciones de extrema derecha europeas (Alonso y Rovira, 2015). Estos factores han estado presentes en las actitudes de la población sobre la inmigración coexistiendo con un creciente descontento y desafección política.

La relevancia de esta comunicación radica precisamente aquí: los análisis sobre formaciones de extrema derecha o de derecha radical en la arena electoral y política europea son numerosos, como también lo están empezando a ser en el caso español. Si bien, los estudios en este ámbito en la Comunidad Valenciana son reducidos y, en algunos casos, no actualizados a la llegada de Vox al escenario político y electoral valenciano.

La comunicación presentada se centra, por tanto, en estudiar la evolución histórica de la extrema derecha valenciana desde la Transición hasta la actualidad, haciendo un repaso por todas las formaciones que han ocupado este espacio en la Comunidad Valenciana y estableciendo sus relaciones con el blaverisme hasta llegar a la fundación del partido político Vox en la Comunidad Valenciana y su representación en las instituciones políticas autonómicas y locales conseguida a raíz de las elecciones valencianas de 2019. Finalmente, como forma necesaria para entender la evolución de esta formación política, se establecerán los rasgos destacados del perfil de votante valenciano de Vox a través del análisis de los datos obtenidos por el CIS postelectoral para las elecciones autonómicas valencianas de 2019.