Desde inicios de la democracia, las Fuerzas Armadas y el Ministerio de Defensa español han promovido la denominada “cultura de seguridad y defensa”. Su objetivo declarado es dar a conocer las misiones y el cometido de los militares españoles para lograr un mayor apoyo, así como actitudes más favorables entre la opinión pública, que históricamente ha mostrado reticencias al uso de la fuerza militar y al gasto en defensa. Si bien, los principales documentos jurídicos y político-estratégicos en el ámbito de la política de defensa han aportado distintas conceptualizaciones del, en principio, mismo problema: conciencia nacional de defensa, cultura de defensa nacional, conciencia y cultura de defensa, cultura de seguridad y defensa… En consecuencia, esta investigación analiza el contenido de esas diferentes definiciones, pues se considera que la multitud de términos empleados han detraído la eficacia de la política en su traslación a herramientas e indicadores de medición, existiendo un déficit en su vínculo con la cultura política.