Este grupo de trabajo pretende reunir ponencias agrupadas en dos ejes. Por un lado, se propone revisar la cuestión de la tensión entre ciencias sociales e ideologías, subyacente a cualquier análisis político. En este sentido, se sugiere abordar la posibilidad del estudio de las ideologías desde un punto de vista científico, los límites y posibilidades de dicha empresa:  ¿Podemos analizar una ideología sin hacer ideología? Y, por otro lado, ¿podemos elaborar teoría política sin ser tachados de ideólogos? Si se acepta que la diferencia entre teoría e ideología se basa en la distinción pensar/actuar, ¿cómo podemos repensar esta relación entre teoría y práctica política? ¿En qué sentido puede la teoría política contribuir a la vida política, y con qué limitaciones?   Por otro lado, y como ejemplo particular de análisis del pensamiento político, se quiere poner de manifiesto el interés de los trabajos en torno a conceptos políticos para este cometido. El análisis y la historia de los conceptos se ha consolidado como una de las líneas de investigación más fructíferas en ciencias sociales. La superación de las principales críticas vertidas a la historia de las ideas ha permitido que la aproximación conceptual se extienda múltiples disciplinas y se revitalice la investigación en torno a la relación entre lo lingüístico y lo extra-lingüístico en los procesos sociales. El grupo quiere recoger trabajos que pongan de manifiesto la utilidad de estos avances para el análisis tanto de los procesos políticos como de las teorías e ideologías políticas concretas. En este sentido, el grupo está abierto a ponencias que teoricen sobre cómo analizar ideologías y conceptos desde la teoría política, o que efectivamente realicen estos análisis siguiendo los pasos abiertos por la Historia de los Conceptos de R. Koselleck, la Teoría del Discurso iniciada por Laclau, o el análisis de ideologías de M. Freeden, o de van Dijk, entre otros.