Los problemas de salud vinculados a los trabajos de cuidado ocupan habitualmente una atención de orden secundario en las políticas públicas de salud. Hay que tener en  cuenta que las mujeres son el sujeto principal en los trabajos del cuidado tanto en el ámbito público como familiar privado.

La pandemia ha incrementado los problemas en la gestión de estos trabajos y ha aumentado el estrés y las deficiencias del sistema español de cuidados, el objeto de este trabajo es analizar esta realidad y defender la necesidad de incorporar una perspectiva  de género fuerte tanto en los estudios sobre la materia como en las políticas públicas concretas.

Partimos de la hipótesis de que las prioridades de respuesta a la pandemia han desplazado la atención de la gestión pública a las urgencias que provocaba la crisis sanitaria y no han podido atender adecuadamente otras necesidades singularmente en los momentos más críticos de la pandemia.