Tradicionalmente, la brecha entre el medio rural y el urbano ha generado dos imágenes diferenciadas. El medio urbano concentra equipamientos colectivos, servicios públicos y oportunidades laborales mientras el mundo rural se encuentra amenazado por la despoblación, la pérdida de peso en la economía, la falta de acceso a equipamientos y servicios públicos esenciales y la precaria capacidad en la toma de decisiones sobre sus propias necesidades. Así, el continuum rural/urbano sigue gozando de centralidad en la agenda política actual puesto que las tendencias sociales contemporáneas han puesto de manifiesto la existencia de un enorme interés por asuntos relacionados con el declive demográfico, la desigualdad territorial, la necesidad de diversificación económica, el paro juvenil, el envejecimiento rural o la masculinización, por citar algunos.

Los partidos políticos, conscientes del impacto de tales transformaciones, han incorporado a sus programas electorales propuestas de dirigidas al mundo rural.

Esta comunicación tiene como principal objetivo ofrecer un análisis de contenido de las propuestas electorales de carácter rural de los principales partidos que concurrieron a las elecciones legislativas de 2019. Entre las principales conclusiones, se destaca que el tema rural está presente en los programas electorales lo que no significa que incluyan la perspectiva rural. Además, todos los partidos desarrollaron estrategias isomórficas para maximizar su presencia y sus diferencias obedecen a alineamientos según bloques ideológicos.